ay, pero después, después relamió tu lengua,
desde un maremoto,
y se lamieron también
los escondites y el zaguán
se chuparon largamente los murciélagos
se libaron señuelos y fantasías, los unos a los otros
y el sabor de la tierra y el zurrón cautivó a los pastores
digeriste con dulzura aquello más terrible
en tu duodeno escondiste refugiados y víctimas
y tu pancreas conminó misterios y sindicatos
en tu estómago comulgaron las favelas y ataudes
y crecieron estaciones en los espejos, con sus trenes y raíles,
y los novios guardaron el sabor de las novias, de algodones de azúcar y piélagos lejanos
y se acicalaron de feria cualquier lunes pasado, aguacates y naranjas, fresas y melocotones
y el arroz y las cigüeñas sofocaron los incendios,
y de sinalefas se colmaron los cuencos y de anáforas las ánforas
y vomitaron los jueces su justicia de escorpiones
los soldados sus violencias se amputaron, para dártelas,
y construyeron los obreros con sus manos todas las alegorías
lamió tu lengua, lamió tu fuego
como un maremoto al mundo

Descárgate GRATIS mi guía:

“Emprende tu camino hacia la felicidad”

Soy Mar Azul Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed do eiusmod tempor incididunt ut labore et dolore magna aliqua.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies